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Priligy - Un arma efectiva contra la eyaculación precoz

Priligy contra la eyaculación precoz

La eyaculación precoz puede causar un gran desgaste mental a largo plazo. Y no solo para el hombre afectado, sino también para su pareja sexual. Con Priligy y su ingrediente activo dapoxetina está por fin disponible un medicamento efectivo contra la contra la eyaculación precoz. Priligy está disponible en dos versiones – dapoxetina en dosis de 30mg o de 60mg. Como alternativa más económica, también se pueden adquirir medicamentos genéricos equivalentes a Priligy. Estos también contienen dapoxetina como ingrediente activo y no se diferencian más que en el nombre comercial.

La dapoxetina se trata de un inhibidor selectivo de la recaptación de serotonina

De primeras suena complicado, pero básicamente su funcionamiento es muy sencillo. En principio, estos inhibidores de serotonina (también llamados ISRS) se han utilizado para tratamientos contra la depresión. En estos casos la dificultad para alcanzar el orgasmo suponía un molesto efecto secundario. Con Priligy, este efecto indeseado se revierte y se dirige a los pacientes con eyaculación precoz. Además de otras funciones en el cuerpo, la enzima serotonina se encarga de la eyaculación a través del sistema nervioso central. La dapoxetina bloquea esta enzima y se encarga de que la serotonina no alcance “su meta” tan rápidamente, lo que a su vez provoca que el orgasmo se retarde. Por este motivo, Priligy actúa directamente contra la eyaculación precoz. La eficacia de la dapoxetina como ingrediente activo ha sido calificada como muy eficaz por estudios científicos. En todos los participantes se pudo constatar una enorme mejoría en cuestión de tiempo. Desde la introducción del pene en la vagina hasta el orgasmo se pasó de una media de 0,9 minutos a 3,1 minutos con una dosis de 30mg de dapoxetina, e incluso 3,6 minutos en el caso de 60mg de dapoxetina. La investigación duró 24 semanas y todos los hombres que participaron confirmaron una enorme mejora en su problema de eyaculación precoz y aseguraron sentirse mejor psicológicamente, que antes de comenzar el tratamiento con Priligy.

Al igual que con el resto de los medicamentos, también con el uso de Priligy hay que prestar atención a los efectos secundarios

A diferencia de otros preparados contra la depresión, la dapoxetina tiene unos efectos secundarios menores. Bastante a menudo se pueden presentar dolores de cabeza, mareos y náuseas después de la ingesta de las pastillas. En menor proporción también puede aparecer diarrea, cansancio, sudoraciones, insomnio o vista borrosa. En menos de un 1% de las personas probadas aparecieron casos de pérdida del conocimiento o súbita bajada de tensión. Esto último se produjo especialmente cuando las personas se habían levantado demasiado rápido de una silla o de una posición vertical. Estos dos efectos secundarios son de vital importancia en relación a la conducción o participación en el tráfico rodado, así como en casos de uso de maquinaria.

No obstante, las interacciones de dapoxetina con otros medicamentos pueden tener consecuencias graves. En ningún caso se debe consumir Priligy en compañía de psicofármacos o inhibidores enzimáticos. Además se debe tener mucho cuidado en el caso de enfermedades hepáticas o del sistema circulatorio y el corazón. Con el consumo de Priligy se debe suprimir la ingesta de alcohol, drogas de cualquier tipo o medicamentos vasodilatadores, entre los que se encuentran Viagra y Cialis entre otros.

En resumidas cuentas, Priligy y su ingrediente activo dapoxetina suponen un remedio eficaz contra la eyaculación precoz. Gracias a ello, no solo se produce una mejora en los síntomas, sino que además tiene un potente efecto sobre el bienestar psicológico de los hombres afectados. Cuando la eyaculación precoz es causa de estrés emocional, una vida amorosa más relajada ayuda asimismo a fomentar el bienestar general.

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